La competición en la Antigua Grecia: atletas, guerreros, héroes, filósofos, políticos y artistas de la antigua Grecia cultivaban una concepción particular de la competición presente en todos los ámbitos de la vida. El espíritu competitivo de los antiguos griegos estaba presente en todos los aspectos de la vida doméstica y religiosa. Hasta el 11 de Noviembre podremos disfrutar de esta exposición en CaixaForum de Zaragoza.
Entender la rivalidad como una característica honorable de la competición
Para entender las razones del espíritu competitivo de los antiguos griegos, tenemos que hace hincapié en la difícil topografía que separaba las diferentes poblaciones de la Antigua Grecia. Aunque estas comunidades compartían un idioma, una religión y un pasado legendario, mantenían sus diferencias e incentivaban una cultura de rivalidad con honor. Esto unido a la naturaleza politeísta de estas comunidades griegas, con familias de dioses titanes y dioses olímpicos, protagonistas de historias de luchas de poder y riñas entre ellos y entre mortales, infundía un carácter competitivo extensamente retratado en la poesía épica, el teatro griego y las representaciones visuales. Y por último, destacar el fuerte sentido de superioridad que sentía el mundo griego con respecto a otras culturas vecinas que contribuía a sus ansias de competir.
Los griegos consideraban que se podía alcanzar la excelencia con un equilibrio entre la mente y el cuerpo; a través de la habilidad atlética, buscaban un físico impecable, y a través de la filosofía, la ciencia y la apreciación de las artes, cultivaban la mente. La historia de la antigua Grecia, tal y como la conocemos, está llena de actos heroicos, triunfos de guerreros y logros de deportistas. La épica de Homero, las victorias de los atletas olímpicos o las aventuras de Heracles se caracterizan por una intensa competitividad.
«Con relación a cada individuo, la primera y más brillante de las victorias es la que se consigue sobre sí mismo»
Platón, Las leyes, 626E
Esta exposición propone una lectura de este espíritu competitivo a través de una selección de tesoros de la espectacular colección del British Museum. La rivalidad y la competición pueden ser vistas como unas emociones negativas, pero también pueden tener un sentido positivo, unificador y creador de una cultura próspera.
Esculturas, monedas, cerámicas o joyas, con piezas icónicas como el friso del mausoleo de Halicarnaso, que retrata la batalla entre los griegos y las amazonas, un busto de mármol de Eurípides, uno de los tres grandes poetas de la tragedia griega, o la estatua del Diadúmeno de Vaison-la-Romaine, una escultura en mármol de un atleta atándose una cinta en la cabeza como marca de su victoria.
Una exposición que nos transportará al mundo de la excelencia competitiva del antiguo mundo griego.
Fuentes e imágenes| CaixaForum Zaragoza