Durante el Holoceno Temprano los niveles del Mar del Norte y el Báltico fueron aumentando hasta cubrir grandes superficies de terreno que una vez albergaron tierra firma y actualmente se encuentra bajo el nivel del mar. La incipiente explotación de los recursos marinos y de la plataforma continental a través de grandes industrias petrolíferas, mineras o de energía eólica ha llevado al descubrimiento de este gran yacimiento arqueológico que por fin ven la luz tras siglos enterrados en la bahía de Hanö (Suecia). Lo que podríamos llamar la nueva «Atlántida» escadinava.
Las nuevas tecnologías nos permiten hacernos una idea del paisaje subacuático gracias a la alta resolución de la fotogrametría 3D de modelado y mapeo acústico hidroeléctrico. Así somos capaces de visualizar bosques completamente sumergidos. El área que los científicos están examinando podría haber sido una vez un paisaje forestal en lo que hoy es el Mar Báltico.
El Báltico presenta una combinación única entre la oscilación marina y la falta de carcoma común que facilita la preservación de depósitos orgánicos de época Preboreal. Ofreciendo a los investigadores una oportunidad única de combinar datos ambientales y arqueológicos de un período que ofrece datos climáticos y culturales importantes en la región. Tras varias inversiones los investigadores de la Universidad de Södertörn han obtenidos importantes datos del fondo marino. El equipo ha descubierto un paisaje submarino con árboles y todos los signos de la actividad humana, incluyendo artefactos tales como: herramientas de pedernal, cuernos de animales y huesos Auroch modificados, así como cuerdas y arpones.
Uno de los responsables de la investigación explica que a diferencia de los yacimientos en tierra firme, el entorno anaeróbico ha permitido la conservación de la mayoría de los restos orgánicos. Que se han datado entre 11.000 y 9.000 años. El nivel del mar se estima que se encontraba hasta 20 metros por debajo del actual. Lo que convertía el emplazamiento en un valle boscoso junto a un río muy cercano a la costa que habría sido un lugar perfecto para las poblaciones del Mesolítico para explotar los recursos de la zona.
Antes de que los arqueólogos marítimos puedan comenzar a cavar, se requiere de una cuidadosa investigación de la cartografía del paisaje bajo el nivel del mar. Utilizando un enfoque multidisciplinario, los arqueólogos, geólogos, biólogos marinos, geógrafos y científicos del medio ambiente pueden crear una nueva imagen de la vida y el clima de hace 11.000 años. Esta investigación también aumentará nuestro conocimiento de los asentamientos prehistóricos y el uso de recursos de manera que los sitios de tierra adentro simplemente no son capaces de hacer.
Fuente| Universidad Södertörn / Björn Nilsson´/ PastHorizon